Juegos del feisbuk: Maldita Paloma

Hola chavalios, hacia tiempo que no me pasaba por aquí a escribir entradas, y mira que dije que reviviria esto aunque lo hiciera yo solo (máximo yao ming). Dejando de lado las promesas que no cumple, centremonos en el tema de esta entrada. Todos conoceis juegos del facebook, lo típico, farmville, cityville, y todos esos juegos que o bien te vicias, o bien quieres matar a los que te mandan más de 8000 invitaciones de los susodichos juegos. Pero hay juegos MUY escondidos que también existe, y el que hoy os presento es uno de ellos, se llama "Maldita Paloma"

El objetivo del juego es simple pero desconcertante, eres un oficinista medio calvo, que no tiene nada mejor que hacer que pegarle patadas a una paloma y superarse sus records a ver cuan lejos llega esto. ¿Qué le ha hecho esta paloma al oficiista? ¿No tiene nada mejor que hacer el oficinista que pegarle patadas a una paloma? ¿Por qué no viene la protectora a ayudar a la paloma? ¿Es la paloma inmortal? A medida que pegas a la paloma patadas. ganas monedas del juego "Paloma Coins", lo que faltaba, ahora las palomas tienen moneda. Bueno, estas Paloma Coins se emplean en comprar accesorios al oficinista o a la paloma, por ejemplo, puedes ponerle dinamita a la paloma y comprar una bota que te de mas potencia y puedas mandar más a la mierda a la paloma. Desafortunadamente, tienes un número limitado de energia, que es lo que usas para aporrear a la paloma, así le das un descansito a la pobre.

Bueno, eso es todo, que tengais un buen verano y eso (que no he hecho ninguna entrada respecto al verano, por pereza y porque no me da la gana de poner lo de siempre). Y esta tarde final del torneo de MK Wii con el Voraj y compañia. Pues eso es todo, ¡hasta otra!

Pantallazo Azul

¿Qué pasa si te sale un pantallazo azul en una demostración del windows? Bueno, el video habla por si solo:

¡¡NO HEMOS MUERTO!!

Exactamente, todos pensareis que hemos muerto, puesto que Arandanus y Manu, que eran los únicos que se dignaban a escribir (1 vez al mes y mucho era para sus manos) se han ido a sus blogs solitarios COFCOFnolosleenisumadreCOFCOF, yo, el gran Kirtacho me he propuesto escribir 1 vez cada mil años para no dejar que las gambas se queden solas este próximo verano.


¡LA COALICIÓN SOBREVIVIRÁAAAA!

El último de Navidad

Antes de comenzar, desearos a todos aquellos que leéis el blog una muy feliz Navidad, que seguro que os la merecéis. Pero vamos allá al asunto, que aunque no pegue mucho con estas fechas, es algo que he decidido no demorar más: este será mi última entrada para Coalición Gambitera.

Coalición Gambitera nació entre tres personas (Manu, Butini y yo) tras sugerir tener un blog conjunto, de forma que tuviese entradas de manera regular y que siempre hubiese una persona que estuviese ahí para contar algo, tarea a la que más tarde se incorporarían Kirtash y Neketrefe. Pero como habréis comprobado, las cosas no han ido tal y como se habían planeado.

Desde su comienzo hasta el día de hoy, la actividad de este blog ha caído en picado, y durante los últimos meses el único escritor que ha tenido he sido yo mismo. No sé si es porque al resto de autores no le apetece escribir o no tiene tiempo, pero muchas veces he tenido la sensación de que, sinceramente, se han olvidado de que un día decidieron apuntarse al blog para escribir. Esto tampoco quiere decir que no tenga una mala relación con ellos, todo lo contrario, pero desde luego, en el blog su huella no ha sido muy grande.

De esta forma esta será mi última entrada para Coalición Gambitera, como ya he dicho antes, pero no mi última entrada. Para el año que viene seguramente abra un nuevo blog, pero personal, visto que no he tenido mucha suerte en lo de llevar un blog conjunto. Intentaré actualizar igualmente más frecuentemente que ahora, que lo he tenido un poco paralizado por los exámenes.

Coalición Gambitera, por su parte, no va a cerrar. No sé si alguno de los autores tendrá alguna iluminación algún día y se pasará para escribir algo, pero si no quedará abierto, aunque sin actividad, de forma que podáis leer las entradas ya publicadas.

Esto es todo lo que tengo que decir, por lo tanto me despido. Ha sido un placer escribiros durante este tiempo, y si os he hecho reír, pues todavía mejor. Así que nos vemos en mi futuro blog, gambas.

Arandanus.

Un poco de todo

Tenía ganas de contar algunas cosas que he visto o me han pasado en estos últimos días, así que allá voy.

Empezamos con cosas de correos. No, no voy a contar mi brillante actuación de enviarme un paquete a mí mismo al confundir el destinatario y el remitente. El caso es que tras volverlo a recibir no me quedo otra que volverlo a reenviar lo más pronto posible, claro. Fui a Correos y me lo cobraron, pero me costó algunos céntimos más que de costumbre, tal vez por el sobre que me dieron, que no era igual al de siempre. Tras pagarlo recibí el ticket y ví que se había cobrado dos artículos: el sobre y el envío. El problema es que el sobre aparece como "SOBRE DE REGALO" y cuesta un euro. Digo yo que no será un regalo muy agradable si tienes que pagar un euro por él, ¿tan mal están en Correos? A este paso, a los Reyes Magos les va a salir cara esta Navidad.

Cambiamos de tema, ahora con la gente del Metro. Todos los días tengo que coger el metro para ir hasta a clase, que consiste en una parada desde Moncloa a Ciudad Universitaria (Línea 6 y tal). Como sabéis, las puertas de los vagones se abren y cierran durante un determinado tiempo que no suele ser muy largo. El caso es que en Moncloa, al ser también intercambiador, pues espera algo más de tiempo que en otras paradas. Este hecho te hace ver cómo la gente corre como una posesa para entrar en el vagón, y una vez dentro, se dan cuenta de que podrían haberse ahorrado la carrera. Pero hay casos en que esta hazaña es algo habitual. Hay personas que, con sólo oír al vagón entrar en la estación, salen corriendo como locas para entrar cuanto antes del Metro. Será que tienen prisa por sentarse.
Por cierto, otro hecho de Metro. El otro día me encontré pegada en una de las puertas del vagón un código de barras de unos pimientos rojos. Aún trato de buscarle alguna explicación. ¿Quién se vería en la necesidad de arrancar el código de los pimientos y pegarlos en una puerta del Metro?

Por último sólo señalar acerca de una canción que venía escuchando atentamente en el autobús (no tengo nada mejor que hacer). La canción era Perfect, de Simple Plan. Ya llevo tiempo dándome cuenta de que el primer disco de este grupo es demasiado "adolescente", pero lo de esta canción ya alcanza unos niveles de ñoñería inigualable. El cantante no puede parecer más pedorro en la canción "no puedes cambiarme, no te gusta como he salido, solías ser mi héroe...", todo esto dirigido a su padre. Cuando este escuchó el disco debió quedarse encantado, vamos.

Esta entrada cholará

Hoy me ha dado por acordarme de expresiones que usaba cuando era niño. Una palabra, una expresión o un Pokémon se ponía de moda y a partir de ese mismo momento todo infante quería tener la capacidad de poder usarlo a sus anchas, sin nada que temer. Dentro de todas expresiones encontré con una muy peculiar: cholar.

¿Qué es cholar? Pues en una ardua tarea de investigación llevada por mí mismo y por mi mente (hacemos un equipo que te cagas) hemos llegado a la conclusión de que el verbo "cholar" proviene de la fusión de dos palabras: chulo y molar. Por tanto, todo aquello que cholaba, era de lo mejorcito que podías encontrarte: no sólo era algo chulo, o simple y llanamente molaba, ¡eran las dos cosas a la vez! Si tú no cholabas, no llegarías a ser nadie en la vida.

Nadie sabe cómo, pero el cholar desapareció de nuestras vidas, o por lo menos de la mía. Las cosas ya no cholaban, pasarón a molar de nuevo, o con el aditivo de "molar mazo". Ahora es el mazo el que lleva las de ganar. Sí, ¿quién le diría al hermano del martillo que se convertiría en un adjetivo que indica mucha cantidad?

A los mazos, cómo no, se les subió la fama, y ahora mismo desprecian a los que antiguamente eran sus compañeros. Ha olvidado como era la dura vida de herramienta depositada de forma desordenada junto a sus amigos la llave inglesa, el destornillador o los alicates. Ahora, como la gente no paran de mencionarlos, creen tener derecho a un compartimento mejor, ¡con tapa! Muchos mazos han perdido la cabeza (literalmente también; gajes del oficio) por esta subida de popularidad tan repentina.

Y aquí concluye mi oda a las palabras de uso popular, algunas menospreciadas, como el cholar, y otras sobrevaloradas, como el mazo. Algún día nos arrepentiremos de no haber seguido apoyando al cholar, os lo aseguro.

No me apetece dormir

Esta va a ser una entrada sin previa planificación. Simplemente, la escribo porque me encuentro ahora mismo, las dos menos diez del seis de diciembre, tumbado en mi cama y sin muchas ganas de dormir. Así que me he dicho a mí mismo: "qué demonios, vamos a escribir una entrada". Y aquí la tenéis.

No sé porque no quiero dormir. Sí, el sueño me está empezando a entrar, pero igualmente, no quiero. ¿Será porque está lloviendo? Lo dudo, porque siendo francos, sería una razón muy estúpida para no dormir. Que no tiene relación, vamos. Sería como decir "tengo hambre, voy a ponerme un jersey". Pues no, porque a no ser que te comas el jersey... Que tampoco, porque seguro que el jersey hace bola, y para tragar eso uno tiene que salivar mucho.

Así que no me queda otra que quedarme mirando fijamente a la pantalla de mi pequeño portátil, contestando muy de vez en cuando al Messenger, nuevos tweets, o cualquier página, como la de la Universidad. Sí, no sé por qué tengo esa manía, pero muchas noches decido que es el mejor momento para mirar la página de la Universidad. Casi nunca hay algo que me interese, pero digo yo que será un hábito adquirido o algo por el estilo.

También pienso en mis cosas, por supuesto, sino no sería una persona. Pero se diferencian los temas entre los que me debato. Primero están los temas académicos: que si cómo me organizo el estudio, cuándo empiezo los dos libros que me quedan por leer para dentro de dos semana, a qué presentación de libro voy para el trabajo. Por otro lado, los sentimentales: que si el amor (forever alone y esas cosas), los amigos, mi timideishon, etc, etc. Y creo que ya. Después temas random como la situación económica, por ejemplo.

Pero bueno, no tengo mucho más que decir. No sé que voy a hacer ahora. Supongo que seguiré un ratillo, y si finalmente no encuentro nada que me agrade, pues dormiré muy a mi pesar.
Por su parte, esta entrada saldrá mañana. Básicamente por temas de que alguien me lea. Así que ale, buenas noches :).